Nos acercamos a Balaguer para dar la buena noticia y hacer unas gestiones y Núria le explico a mi padre que estaba teniendo antojos de jamón salado, y bueno, durante la noche no dejo de soñar en ella y en el jamón.
¡Así que a la mañana siguiente se presenta en casa con una pata de jamón entera!
No hay comentarios:
Publicar un comentario